
«He quedado fascinado por un Dios infinitamente cercano, más íntimo a nosotros que nosotros mismos, de tal manera que, por más profunda que sea nuestra desesperación, él se pone entre nosotros y la nada»
Olivier Clément a un año de su partida.
Si has abrazado el honor y el decoro del desierto, quédate en el silencio profundo y despréndete de lo que no cuenta...
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario